Explosión donostiarra de júbilo cuando Zamora empató un partido que parecía perdido
La Liga se decidió a favor de la Real Sociedad en el último minuto
Alineaciones SPORTING DE GIJON: Castro; Redondo, Maceda, Jiménez, Cundi (Osear Ferrero, minuto veintiuno); Uría, Joaquín, Ciríaco; Abel, Mesa (Doria, minuto setenta y nueve) y Enzo Ferrero. REAL SOCIEDAD: Arconada; Celayera (Larrañaga, minuto setenta y nueve), Górriz, Cortabarría, Olaizola; Diego, Alonso, Zamora; Idígoras (Baquero, minuto cincuenta y seis), Satrústegui y López Ufarte.
Diez mil guipuzcoanos enmudecieron mientras duró la victoria del Spórting gijonés El estado del terreno influyó en tres de los cuatro goles
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Había sido el equipo que paseó su desdeñable invento del «cerrojo» como sistema para ir puntuando fuera. Y alguien, ya digo, se propuso el cambio: hacer jugadores atletas que fueran válidos para el primer equipo, idea Resultado práctica, a la larga, que se antepuso a la cláEmpate a dos, que era lo que pretendía la Real, logrado en el último minuto de Liga y con el que se sica de ganar campeonatos juveniles que proclamaba campeón. Cortabarría abrió la cuenta, de penalty, al minuto siete, por derribo de Maceda a sólo Servían para quemar productos de canLópez Ufarte. Igualó Mesa un minuto antes del descanso tras un rechace de la defensa donostiarra. Al minuto de la reanudación titubeó la zaga guipuzcoana y Mesa se encontró con vía libre para largar un gol tera. Y sacó el hermoso ramillete de unos a placer. Cuando todo estaba perdido, al minuto noventa, Zamora aprovechó un rechace asturiano para muchachos que, lo primero, sabían correr, luencontrarse solo dentro del área y afinar el disparo, que se coló como un obús entre el delirio easonense. char y sufrir. En medio campo salían Diego, Arbitro Alonso y Zamora, valores altísimos en lo indiEl catalán Enríquez Negreira dejó jugar, aplicando la ley de la ventaja. El mal estado del campo vidual para una perfecta labor general de eminfluyó en más faltas de las normales, todas sin intención, y el arbitro tornó la decisión de mostrar tarjetas puje y sacrificio. Delante, primero Satrústegui; para demostrar su autoridad y que estaba ahí, en el partido Cartulinas, pues, para Uría, Maceda y Osear López Ufarte, después; Baquero, mañana; Ferrero, por un bando; y para López Ufarte, Alonso y Baquero, por otro. Larrañaga, también a la espera, respaldando Otros factores todos el trabajo de esa otra línea de defensoLos ambientales quedan reflejados en la crónica. Tarde de paraguas, campo encharcado y llenazo en res con bien ganada fama o a la retahila de el estadio desde nucho antes de la hora de comienzo. excepcionales guardametas formados en la playa: Ignacio Eizaguirre, Galarraga, Bagur, Araquistain, Zubiarrain, Esnaola, Artola, Urruticoechea, Arconada y los que seguirán, con GIJON (Ventura Güera, enviado esperal favoreció al Athétic vasco y al Rácing cánmención también para Iríbar, también de allí, cial). Habían enmudecido el «txistu» y el tabro, relegando a la Real el tercer puesto que se escapó hacia Bilbao sin pasar por la tamboril, allá en la grada sur, enrabietados dentro del triple empate. Hacía un año, tamReal. por la impotencia de un marcador en contra bién, se pudo conquistar el laurel del éxito, que significaba el «k. o.». Diez rtiil voces guipero a diez minutos del final, allá en Sevilla, Hechos todos estos apuntes, descriptivos puzcoanas, que habían transformado la playa esta misma Real de ahora hizo agua en sus unos, de juicio otros, alguno podría achade San Lorenzo en la de La Concha easovías de contención y se fue abajo como barco carme la carencia de datos de lo que fue su nense desde mucho antes de que las calles hundido sin que nadie más contribuyera a su último partido. Y respondería yo, exagerando estuvieran puestas, diez mil —decía— se hacatástrofe. la nota, que el partido estuvo ahí, en el ambían roto en la ilusión inalcanzable de llegar a A la tercera, pues, fue la vencida. En el úl- biente, en la emoción. De fútbol, más bien tiempo con un gol. Era, a falta de un minuto, timo minuto y cuando textos habían pensado poco. Pequeños detalles que harían destacael todo o el nada' para una reivindicación deen el Real Madrid. Un diyno campeón. Su pobles a Alonso, López Ufarte, Cortabarría, Ciportiva con la que todos habían soñado. Y en lítica de sencillez, su espíritu de constante riaco y Mesa dentro de una uniformidad en el ese minuto, con todo ya perdido, con la resigpromoción, su estilo de equipo antiguo con fútbol como bloque que intentaron los dos nación a flor de pieles, saltó el chupinazo de espectáculo del que ya apenas se ve, me lleequipos. Si no lograron más fue por el teZamora que valía definitivamente el título. van a la alabanza, que no es generosa, sino rreno, que dejaba muerto el balón y hacía imFue asombrosa la mutación de esas persobien ganada, a pulso, con corrección, con precisa cualquier acción, confundiendo a los nas, ataviadas todas de blanquiazul: había todo lo que hay que exigir. propios jugadores. Los tres últimos goles triunfado su ilusión; se habían hecho válidos —los dos del Spórting y el definitivo del emHace años cambió alguien su estructura. los cánticos alegres del «aurrera txuri urdipate— creo que tuvieron mucho que ver con ñak» que, a coro, entre acordeones y pandeel factor acuático expresado, pues fueron tres retas, esos miles de gargantas, habían entobalones que se quedaron casi clavados en el nado confiados en los chigres de sidrina. Se área a pies de chutadores desmarcados. había pasado de la desesperación al delirio. Mesa, en ambas ocasiones, le dio el disgusto El estallido fue grandioso y la descripción ama la Real. Y Zamora, a la parroquia lejana del El jueves, día 30 de abril, a las 8,45 noche biental más que difícil, imagínense, en un Madrid. CAMPEONATO DE ESPAÑA claro desbordamiento de charanga verbenera. Los dos tantos del Spórting fueron determi(Copa de S. M. el Rey. Octavos de Final) Porque, además, a ese público entusiasmado nantes de esa emoción y conmoción del final se unió el gijonés para aplaudir a un equipo de Liga. Habían merecido los asturianos esos F. C. BARCELONA simpático, de enorme personalidad, que u otros goles, con su fútbol de ataque en la CONTRA había luchado y sufrido lo indecible para esperanza remota de colarse por carambola poder ser campeón. en el torneo de la UEFA. Pusieron mucho CASTILLA C. de F. Lo había merecido la Real, pese al desempeño y ratificaron la idea aquí expresada VENTA DE LOCALIDADES.—Numeradas, t a q u i l l a s gaste en su carrera contra el reloj con un gol de que son como un ciclón ante el contrario interiores del estadio, puerta 42, HOY MARTES de desventaja. Era realmente imposible llevar Y MAÑANA MIÉRCOLES, de 6 a 9 noche, y el de turno, favorecidos además por una Real JUEVES, de 11 a 1,30 tarde. el balón diez metros adelante, con el campo que se preocupaba más de crear que de desSin numerar, en la taquilla «O», los mismos convertido en laguna. Era imposible, digo, truir, dejando sueltos a algunos gijonenses días y horas. disparar a gol. Era tan imposible que llagara para encontrarse sueltos en la rápida operaDe todas clases, en el estadio, el JUEVES, ese empate que ni el más optimista de los desde las 7 de la tarde. ción de contragolpe. Los señores socios del Real Madrid tendrán acceso donostiarras hubiera apostado un .céntimo por Lo único que no me cuadra de la Real es al estadio, mediante la presentación del carné y reello. Pero la tenacidad obró el milagro. Y ni que, jugándose un título, y ganando por cerocibo corriente, pudiendo ocupar cualquier localidad jugadores, ni espectadores, dieron crédito duuno hasta cerca del descanso, estuviera al SIN NUMERAR, rante centésimas de segundo a esa visión borde de la hecatombe durante tanto tiempo. LOS MENORES DE CATORCE AÑOS, PARA SU que tenían delante. Más de uno estuvo al Esto no le hubiera pasado al Madrid. Luego, ACCESO AL ESTADIO, PODRAN ADQUIRIR UNA borde del infarto. Y otra vez resonaron alela suerte o el merecimiento le auparon nuevaLOCALIDAD ESPECIAL DE CINCUENTA PESETAS. gres el «txistu» y el tamboril. Más que una mente al éxito para celebrar con abundantes proeza se había conseguido resucitar de la espumosos lo que tantos querían en Donosti. propia muerte, un ganar pese a la ilusión perEn fin, colofón de lujo en un ambiente de padida. Los once chavales no supieron ni cómo sión, pasando por el contrapunto de una desZamora había acertado en situación tan agodicha efímera. Valga, pues, ahora lo que dice Desea oficinas en alquiler para instalar biante; y se pusieron a llorar, como niños su himno: «Aurróra mutillak, aurrera txuri urdisus servicios de 3.000 a 5.000 m 2 en grandes, ganados por la emoción de ser camñak, gazte gaztedik, aupa mutillak» (Adelante edificio de primera categoría, peones por primera vez. muchachos, adelante blanquiazules, adelante bien situado Hacía cincuenta años que la Real no vivía muchachos, aupa juventud). Y que resuenen Dirigir ofertas por escrito al Apartado de tan cerca del entorchado, pero el Rácing le Correos 53.175, Madrid a fondo los sonidos dulces de «txistu» y tamABC (Madrid) -goles en Atocha y el cociente genecoló siete 28/04/1981, Página 65 boril. Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial,

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